
Waldo Ariel Suero, presidente del Colegio Médico Dominicano, hizo el anuncio através de su teléfono celular, al tiempo que las secretarias generales de las uniones de enfermerías afiliadas a la Casc y la CNTD, Minerva Magdaleno y Rafaela Figuera; afirmaron que los agentes policiales que acordonaron el lugar tras la ocupación, les lanzaron gases tóxicos por las puertas, causando malestares visuales y respiratorios al grupo, compuesto por unas 20 personas.
Los profesionales de la salud, se quejaron de que el contingente policial, comandado por un mayor de apellido Familia, los sometieron, además a ruidos ensordecedores la noche del martes y en la madrugada de este miércoles con sirenas, a manera de tortura para evitar que pudieran dormir, unos minutos.
Debido a esta situación se han visto precisados a defecar y orinar en fundas y en envases plásticos, situación que calificaron de deprimente y abusiva.
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