SANTO DOMINGO.- La Comisión que investigó la muerte de la fiscal adjunta, Giselle Reyes Díaz, afirmó que el sargento mayor Augusto Luciano Familia, fue quien le quito la vida a la funcionaria, por lo que en las próximas horas la Fiscalía de la provincia de Santo Domingo solicitará medidas de coerción consistente en prisión preventiva contra el Sargento mayor.
Los investigadores, tendrán que emplearse a fondo para determinar las razones que provoco la muerte de Reyes Díaz, luego de ocho meses laborando juntos en el Departamento de Delitos de Género, de la Fiscalía.
Los fiscales Perfecto Acosta, de la provincia de Santo Domingo, Alejandro Moscoso Segarra, del Distrito Nacional, y el procurador general de la Corte de Apelación de la Provincia de Santo Domingo, Julio César Sánchez, quien leyó el informe, explicaron que el relato de los hechos por parte Luciano Familia carece de lógica y en ocasiones resulta incoherente.
Por tal razones, dijeron que los resultados científicos de balísticas y patología permitieron a la comisión concluir que no hubo participación de terceros ni se trató de un intento de atraco como alegó Luciano Familia.
Aunque no tienen elementos que sugieran las razones del asesinato, las autoridades no descartan que entre la víctima y el presunto victimario hubiese alguna relación sentimental.
Las pruebas de balísticas determinaron que los 13 casquillos y el proyectil extraído del cuerpo de la victima corresponden al arma de reglamento que portaba Luciano Familia, en el momento en que acompañaba a la hoy occisa. El arma es una pistola Tauro, 9 milímetro, número 3ZG54399.
De su lado, el jefe de la Policía Nacional mayor General José Polanco Gómez, dijo que Familia tenía alrededor de trece años en la institución y que hasta ahora no había ningún tipo de querella o actitud violatoria de la moral y las buenas costumbres en su contra.
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